Ojalá todas las preguntas de este tipo, tuvieran una respuesta precisa que nos brindara alivio y esperanza rápido, pero la realidad no es así. ¿Cuándo deja de doler la muerte de un ser querido? La respuesta sería, meses, quizás un par de años o más, lo único certero, es que el duelo por la muerte de un ser querido, no entiende de tiempos cronológicos o antidepresivos recetados.
Cuando aún no deja de doler la muerte de un ser amado, es normal sentir tristeza, ansiedad y a veces ira. Contar con el apoyo de amigos y familiares, así como terapias psicológicas, pueden ayudar en este proceso. Por ello te recomendamos asistir con un terapeuta especializado en tanatología, él te podrá guiar y ayudar a procesar esta etapa de la forma más sana posible, aligerando tu dolor.
En Catrina, estamos para apoyarte, antes, durante y después del fallecimiento de un ser querido, En nuestro comparador podrás encontrar al mejor tanatólogo cerca de ti. Solo tienes que colocar tu código postal o alcaldía y te arrojará una lista de los mejores profesionales con sus precios, cerca de ti. Buscar Aquí.
Si, por otro lado, buscas recibir ayuda de manera gratuita, te invitamos a unirte a nuestro grupo de acompañamiento impartido por tanatólogos y psicólogos, que te darán tips y ciertas dinámicas para procesar tu dolor. Regístrate Aquí.
La resiliencia
Seguramente has escuchado esta palabra muy a menudo, pues cuando se vive un duelo, es normal escuchar a las personas decir que “debemos tener resiliencia y esperanza”. Esta palabra es la clave que determina, si podremos, o no, superar la muerte de un ser querido. ¿Cómo?
La resiliencia es la capacidad de una persona para adaptarse y recuperarse de situaciones estresantes, traumáticas y dolorosas. Se refiere a la habilidad de superar obstáculos, mantener su bienestar emocional y psicológico, además de encontrar soluciones a sus problemas. Pero ¿Cómo desarrollar la resiliencia, cuando la pena nos invade?
Formas de desarrollar la resiliencia
- Haz ejercicios de resolución de problemas y toma de decisiones.
- Mantén una actitud positiva y enfócate en soluciones en lugar de problemas.
- Fortalece las relaciones sociales con tus amigos y familiares y busca apoyo emocional cuando sea necesario.
- Aprende técnicas de manejo del estrés y la ansiedad.
- Practica la autocompasión y la autoaceptación.
- Adquiere nuevas habilidades y enfrenta nuevos desafíos.
- Cultiva una perspectiva flexible y una mentalidad de crecimiento.
Desarrollar resiliencia requiere tiempo y práctica, pero todos los esfuerzos por más chiquitos que sean, nos ayudan a mejorar nuestra capacidad de enfrentar situaciones difíciles. Para ayudarte en este proceso, te dejamos la siguiente lectura sobre el duelo y la vida, que te brindará una perspectiva diferente de la situación más dolorosa. Clic Aquí.